
La Lic. Eliana Lepez capacitó a la Sexta División de AFA y al cuerpo técnico en técnicas para afrontar y manejar la frustración, con el objetivo de potenciar el rendimiento individual y colectivo._
La Secretaría de Deporte continúa reforzando la formación integral en los más chicos. Esta vez en el fútbol. Mediante el trabajo del programa Construyendo Valores, y una de sus capacitadoras la Lic. Eliana Lepez, se llevó llevó adelante una jornada de capacitación destinada a la Sexta División de AFA y a su cuerpo técnico. La temática elegida fue “Técnicas de Afrontamiento para el Manejo de la Frustración”, un aspecto clave en la preparación de los jóvenes futbolistas.
El encuentro comenzó con una reflexión sobre qué es la frustración, definida como una emoción que aparece cuando una persona no puede satisfacer una necesidad, deseo u objetivo, lo que genera sentimientos de insatisfacción, decepción o incluso ira. Se explicó que puede originarse tanto en factores internos como externos y que, al no ser reconocida, muchas veces opera en silencio condicionando el estado de ánimo.
Posteriormente, cada jugador trabajó en identificar aquello que lo frustra en lo cotidiano, con el fin de traer a la consciencia lo que muchas veces permanece oculto. “Nadie puede cambiar lo que no distingue”, remarcó Lepez, subrayando la importancia de este primer paso para cualquier proceso de mejora personal.
La reflexión también se trasladó al plano colectivo, donde el equipo en su conjunto reconoció sus frustraciones compartidas. Esa dinámica grupal permitió poner en común sensaciones, fortalecer vínculos y generar un sentido de pertenencia.
Con las ideas ya sobre la mesa, se avanzó en un segundo bloque de actividades: trabajos en parejas, en los que los futbolistas diseñaron planes de acción para transformar la teoría en aprendizaje concreto. El objetivo fue que cada jugador pudiera llevar lo descubierto a la práctica, tanto en su vida personal como en el campo de juego.
La metodología se basó en un enfoque activo: que los propios deportistas descubran sus áreas de mejora, reciban herramientas para afrontarlas y luego se animen a utilizarlas en su día a día. “La clave está en probar, implementar y volver con los resultados para seguir ajustando y mejorando”, señaló la coach, convencida de que el entrenamiento mental es tan vital como el físico y el técnico.
De esta manera, San Martín refuerza su compromiso con la formación integral de sus juveniles, entendiendo que aprender a gestionar emociones es un pilar indispensable para el crecimiento deportivo y humano.