
En Racing causó asombro la decisión del cuerpo técnico tras disputar el clásico con Independiente: no habrá concentración para el próximo partido frente a River. La medida rompe con la rutina habitual de aislar al plantel antes de enfrentamientos importantes, y generó debates entre los hinchas y el ámbito interno del club.
Según fuentes cercanas, la opción responde a que el partido contra River se jugará en el Cilindro, con horario vespertino, lo que permitiría un traslado más seguro ese mismo día sin necesidad de alojarse en un hotel. Además, se pretende mantener al equipo en su ambiente habitual, con la idea de generar comodidad en los jugadores.
Algunos jugadores mostraron sorpresa ante la decisión, ya que la concentración prolongada representa una forma de despejar la cabeza y focalizar energía. No obstante, otros entienden que mantener la rutina diaria puede favorecer la serenidad de los futbolistas, evitando sobrecargas psicológicas innecesarias.
Este cambio de hábito se suma a un contexto de exigencia para Racing, que debe disputar varios partidos decisivos en el tramo final de la Liga Profesional. Veremos si la decisión rinde frutos o si deberá volver atrás ante la presión deportiva.